Papeles importantes
El día estaba calido, el llanto del gato lo despertó, todavía le dolía la cabeza, había tomado demasiado vodka para lo que estaba acostumbrado, pero como ser humano a veces necesitaba la denigración en esos términos gustosos de bajeza moral que acontecemos a representar cuando nuestras depresiones se adueñan y juegan con nuestra vida, pero nuestro protagonista rara vez terminaba ejerciendo estos papeles de reparto. El sabia manejar este papel a la perfección, sabia los modales, sabia las conjeturas que participaban en dicho ritual, pero esta vez había prevalecido y se había olvidado el guión y sus supuestas 4 copas se convirtieron en 5, luego en 6 y así sucesivamente suplanto el llanto y el amor fallido por la fragancia y el gusto ávido. Si no hubiera sido por el felino quizás ahora estaría muerto en su propia cama atragantado con esa mezcla de repulsión y acidez. Se levanto, busco al gato tambaleándose y sujetándose la cabeza que se le abría a gajos le abrió la puerta y lo tiro afuera amenazándolo de echarlo a la calle la próxima vez que pidiera tan fervorosamente por sus necesidades.....